Lo que llamamos comúnmente fantasmas, son espíritus que por diferentes razones han quedado en este mundo .Según mí forma de ver, podríamos clasificarlos en tres grandes grupos.
Clase 1_ Son almas que en algún momento han habitado la casa o el departamento donde vivímos y están atrapadas en una especie de limbo, repitiendo actividades que llevaban a cabo cuando estaban vivas, reproduciendo una y otra vez sus rutinas en el hogar. Esto sucede principalmente cuando las personas han tenido una muerte violenta o súbita y no han comprendido que ya no tienen un cuerpo físico. Supongamos que la esposa del antiguo dueño tuvo un accidente, cayó por las escaleras y falleció dentro de la casa. Cabe la posibilidad que no se diera cuenta que ha muerto, y por lo tanto es posible que usted la vea como una aparición por la casa, haciendo la misma cosa una y otra vez.
Clase 2_ Son los comunmente llamados poltergeists, este tipo de fantasma tiene la capacidad de abrir y cerrar puertas, mover muebles o diferentes objetos. No se lo llega a ver, pero si se ven los resultados de su actividad, no son peligrosos, pero pueden ser sumamente molestos al punto de dejarle la casa patas para arriba. Principalmente son juguetones, y se manifiestan con cosas relacionadas con la energía (encender y apagar luces, televisores, radios o cualquier aparato que utilice la misma) y a menudo centran su atención en los niños, porque estos son más abiertos al mundo de los espíritus.
Clase 3_ Estos tipos de fantasmas son generalmente un miembro de la familia que ha decidido quedarse en este plano. Sobre todo si la persona ha fallecido de forma no natural, es posible que quiera comunicarse para llegar a una especie de conclusión con nosotros. También puede ser que se manifieste en un momento difícil para ofrecernos su apoyo, o en un momento de felicidad para sumarse a la celebración.
Cómo ayudarlos: Debe auxiliarlos mediante la oración, cuál sea la religión que usted profese, y hablando con ellos con mucho amor, para hacerles saber adecuadamente que ya no les corresponde estar aquí y que deben seguir su camino de evolución como espíritu. Ellos deben comprender que el mundo espiritual que los aguarda es lo mejor.
Clase 1_ Son almas que en algún momento han habitado la casa o el departamento donde vivímos y están atrapadas en una especie de limbo, repitiendo actividades que llevaban a cabo cuando estaban vivas, reproduciendo una y otra vez sus rutinas en el hogar. Esto sucede principalmente cuando las personas han tenido una muerte violenta o súbita y no han comprendido que ya no tienen un cuerpo físico. Supongamos que la esposa del antiguo dueño tuvo un accidente, cayó por las escaleras y falleció dentro de la casa. Cabe la posibilidad que no se diera cuenta que ha muerto, y por lo tanto es posible que usted la vea como una aparición por la casa, haciendo la misma cosa una y otra vez.
Clase 2_ Son los comunmente llamados poltergeists, este tipo de fantasma tiene la capacidad de abrir y cerrar puertas, mover muebles o diferentes objetos. No se lo llega a ver, pero si se ven los resultados de su actividad, no son peligrosos, pero pueden ser sumamente molestos al punto de dejarle la casa patas para arriba. Principalmente son juguetones, y se manifiestan con cosas relacionadas con la energía (encender y apagar luces, televisores, radios o cualquier aparato que utilice la misma) y a menudo centran su atención en los niños, porque estos son más abiertos al mundo de los espíritus.
Clase 3_ Estos tipos de fantasmas son generalmente un miembro de la familia que ha decidido quedarse en este plano. Sobre todo si la persona ha fallecido de forma no natural, es posible que quiera comunicarse para llegar a una especie de conclusión con nosotros. También puede ser que se manifieste en un momento difícil para ofrecernos su apoyo, o en un momento de felicidad para sumarse a la celebración.
Cómo ayudarlos: Debe auxiliarlos mediante la oración, cuál sea la religión que usted profese, y hablando con ellos con mucho amor, para hacerles saber adecuadamente que ya no les corresponde estar aquí y que deben seguir su camino de evolución como espíritu. Ellos deben comprender que el mundo espiritual que los aguarda es lo mejor.
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